Saltar al contenido

Menorca aún no ha tocado techo».

Miguel Ángel Sicilia, presidente del Colegio de Aparejadores, Arquitectos Técnicos e Ingenieros de Edificación de Menorca, confirma el dinamismo del sector de la construcción y que las perspectivas de empleo se extienden hasta 2025. Sicilia cree que Menorca ya no es un territorio especulativo porque quien invierte en la isla lo hace porque quiere disfrutar de su uso.

¿Cómo está la locomotora de la construcción en Menorca?
Sigue imparable, como en 2022. Con obras y encargos sobre la mesa que no sólo superan en horizonte el año 2024, sino que sabemos que hay constructores dando fechas de inicio para septiembre de 2025. Es cierto que las cifras han bajado respecto al año pasado en los dos últimos trimestres de este ejercicio, pero son años muy buenos comparados con años como 2017-2018.

¿Estamos hablando principalmente de chalets y casas unifamiliares de nueva construcción?
Siempre se trata de chalets, pero también estamos empezando a ver movimientos en cuanto a terrenos para desarrollar un condominio. Desde finales de 2022 estamos viendo movimientos en la zona de Maó para el desarrollo de viviendas, porque incluso los terrenos paralizados no son interesantes. Esperamos que el nuevo gobierno tome medidas para mejorar la densidad y la vivienda multifamiliar.

¿En qué sentido?
El constructor no puede generar viviendas si los números no funcionan. Con los criterios de densidad y los parámetros de construcción actuales, no es posible. Estamos hablando de que si una parcela puede generar diez unidades, puede generar 15 unidades. No estamos hablando de más consumo de suelo, sino de más uso del suelo.

Leer también:  Una DANA trae lluvias que podrían ser fuertes este miércoles en Menorca

Las perspectivas son buenas por lo que veo….
Las perspectivas son que Menorca aún no ha llegado a su límite. No hablamos de construir más, ni de cambiar el modelo, sino de su potencial. Siempre estaremos rodeados de agua y esto genera un valor intrínseco que hace que un piso en la calle Fort de l’Eau de Maó, una casa en el centro de Alaior o una casa frente al mar en Punta Prima sean muy valiosas en sí mismas. Hemos pasado la crisis, la covida, y Menorca ha estado a la altura. Hoy la gente invierte para disfrutar de su casa, no para especular.

Sin embargo, en otros lugares se está empezando a notar una desaceleración causada por el aumento de los tipos de interés. ¿No se están dando cuenta?
De momento no estamos notando la desaceleración de la que hablas, pero imaginamos que llegará tarde o temprano. En cierto modo, nos vendrá bien para atender mejor las necesidades que actualmente no se cubren por falta de recursos. El mercado se autorregula y Menorca, gracias a su idiosincrasia, tiende a estabilizarse. Menorca es un paraíso a dos horas de cualquier capital europea.

¿Lo dices por la falta de mano de obra?
Se siente la falta de mano de obra cualificada y no cualificada, lo que repercute en general en las empresas que operan, hasta el punto de que ni siquiera pueden atender a sus clientes porque no tienen personal suficiente. Ni siquiera pueden traer mano de obra de fuera porque no hay viviendas y vivir aquí es caro.

Hace unos meses pediste un plan de vivienda.
Menorca necesita generar viviendas, de lo contrario los precios seguirán subiendo. Es necesario crear un plan que genere un escenario realista para los próximos 15-20 años. Conocer el suelo público y privado disponible para cruzarlo con la evolución real de la sociedad menorquina. Hay mucha demagogia sobre las viviendas cerradas, cuando sabemos que no es la solución para las nuevas generaciones. Tenemos que empezar a gestionarlas. El problema lo define todo el mundo de muchas maneras. Estamos esperando opciones de solución. Tenemos que crear terrenos disponibles en zonas estratégicas.

Leer también:  La aprobación definitiva del Plan Territorial de Menorca irrumpe en la campaña electoral

¿Qué le pides al nuevo gobierno?
Nuestras peticiones se refieren a la normativa para que no nos ahogue, a la racionalización de la administración pública, a unas relaciones claras y prácticas para la sociedad. El administrado debe poder saber lo que puede hacer. Parece que las intenciones del nuevo ejecutivo van en esta dirección y que pretenden dar respuestas. Veamos si finalmente será así.

Y para profundizar en el tema aquí la fuente

Periodista en Gaceta Balear

Martina Rodríguez es periodista española nacida en Mallorca, España, en 1965. Comenzó su carrera trabajando como reportera local para el Diario de Mallorca. En 1993, fue contratada por el periódico nacional El País, donde trabajó como corresponsal en la oficina de Madrid. También ha trabajado como periodista independiente para varias publicaciones, incluyendo El Mundo y The Guardian. En los últimos años, ha sido colaboradora habitual de la revista online Gatopardo.

Rodríguez está considerada como una de las principales periodistas españolas. Ha ganado varios premios por su trabajo, entre ellos el Premio de la Asociación de la Prensa de Madrid (2003) y el Premio Nacional de Periodismo (2007). En 2010 recibió el prestigioso Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades.

Rodríguez también ha participado activamente en la promoción de la libertad de prensa y la libertad de expresión en España. En la actualidad colabora con el diario de las islas baleares: Gaceta Balear.

Leer también:  Nace en Menorca la primera asociación de empresarios extranjeros

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *