La suspensión del uso del Impuesto del Turismo Sostenible para las finalidades originales que justificaron su implementación por el Govern de Francina Armengol en 2016 ha supuesto que Menorca se haya visto privada de 35,3 millones de inversión que le habrían correspondido desde la irrupción hasta la actualidad .
La suma corresponde al 12 por ciento de la recaudación balear por los turistas entre 2020 y 2022, que aumentó a 176,8 millones de euros, y que era la que se habría destinado a la Isla en la proporción apoyada para proyectos ambientales del sector . En 2020 la ecotasa marcó unos ingresos de 36,8 millones, ya en plena crisis turística por la pandemia, mientras que entre 2021 y 2022 la recaudación prevista por el Ejecutivo, tal y como ha reflejado en los presupuestos del nuevo año, es de 140 euros de euros.