Robos en Mallorca: roban en un bar cercano a la comisaría de la Policía Nacional y sirven bebidas

Todo ocurrió el domingo por la noche. El bar antes mencionado estaba cerrado y la actividad en la calle Simó Ballester era mínima. Sólo unos pocos agentes de la Policía Nacional, al final de la calle y en la esquina del Passeig Mallorca, entraban y salían del local. Hacia las 22 h, en la misma calle y a pocos metros de distancia, tres jóvenes encapuchados forzaron la puerta del local. Una vez dentro del local, los ladrones accedieron al bar y se llevaron todo lo que pudieron: entre 150 y 200 euros en monedas, dos walkie-talkies y tres teléfonos móviles utilizados por los camareros. Luego procedieron a servirse una copa.

Al mismo tiempo, el dueño de la tienda, que estaba en casa, recibió una alarma en su teléfono móvil. ALARMA MÓVIL que tiene en el establecimiento. Tras ver la cámara de seguridad, que fue dañada poco después por los ladrones, acudió inmediatamente al lugar de los hechos, no sin antes alertar a la Policía Nacional. Al llegar, los agentes ya habían detenido a los tres individuos.

El trío de ladrones estaba formado por dos jóvenes veinteañeros y un menor de trece años, que se había escapado de un centro residencial y tenía un una historia muy turbulenta. Este último, al no ser responsable, fue trasladado de nuevo a una prisión de menores por decisión de la Fiscalía de Menores. Los otros dos se arriesgan a un delito de robo. El valor estimado de lo que pretendían robar, además de los daños en la puerta, la caja registradora y la cámara de vigilancia, es de unos 800 euros.