El presidente del Consell de Ibiza, Vicente Marí, dictaminó ayer que esta institución podría aceptar que el Gobierno traspase la gestión de las residencias en los meses que quedan de legislatura. Menos aún cuando el gobierno insular no está de acuerdo con la dotación económica que la Ejecutiva Francina Armengol pretende hacer con esta jugada.
Máire se mostró dispuesta a rechazar este traslado delante de la presidenta y tras reunirse con ella en la sede del Consell. El presidente explicó que las dos instituciones aún están negociando sobre este tema. También ha dejado claro, no obstante, que hay una gran diferencia entre la dotación económica que propone el Gobierno y la que el Cónsul considera necesaria para gestionar «adecuadamente» este servicio. El Gobierno pretende traspasar las competencias con el actual presupuesto de estas infraestructuras, y Ibiza asegura que éste sería superior para acometer mejoras en el servicio y afrontar que el coste de la vida es más alto en esta isla que en Mallorca. Se añade que aún no se ha pactado nada sobre «las deudas de los últimos siete años», aunque, en este caso y según ha explicado Vicente Marí, será más fácil encontrar una solución.
“Queremos ser prudentes”, insistió el presidente, “y aceptar la transición con todos los medios humanos y económicos para llevar a cabo la gestión que Ibiza se merece”. Marí dejó claro que el cónsul «tiene voluntad» de aceptar esta competencia. Pero también enfatizó que no lo hará hasta que no tenga la garantía de una «financiación adecuada». «Debemos estar seguros de que la competición se desarrollará con las máximas garantías para el usuario», dijo, y por eso exigió «generosidad» a Armengol en esta negociación.
El Gobierno no cederá
De las palabras del presidente Armengol, por otro lado, se desprende que la posición del Gobierno, por el momento, es no ceder a las demandas de Ibiza. El socialista ha señalado que las competencias en materia social son «unas de las más importantes» de las que gestionan los cónsules. A su juicio, el Gobierno sigue gestionando las residencias en Ibiza «una cierta anomalía» ya que, dijo, «la proximidad de la institución» permite que la gestión de estos servicios sea más sencilla.
Francina Armengol dijo que el acuerdo entre las dos administraciones no es «difícil» y puso como ejemplo la negociación sobre el traspaso de estas competencias en la pasada legislatura al Consell de Mallorca. “Vamos a intentar hacer este acuerdo”, dijo un presidente que viajó ayer a Ibiza sin mucha convicción para presentar las 25 medidas del nuevo “escudo social” con las que el Gobierno pretende hacer frente a las tres crisis Consejera. a los que se enfrentan actualmente los ciudadanos: la inflación, el cambio climático y la guerra entre Rusia y Ucrania.
