El grupo medioambiental GOB recomienda reducir los aparcamientos de playas vírgenes para evitar la saciedad de estos galgos, cuya mayor comprensión del impacto medioambiental «afecta a la calidad del turismo y la experiencia de Menorca».
Los ecologistas recuerdan que, según un informe de 2019 elaborado por el Observatorio Socioambiental de Menorca (Obsam), playas como Cala Mitjana superaron en 7 veces su capacidad y Macarella, 8; y Cala en Turqueta, casi 4.
El GOB afirma que esta congestión, por un lado, conduce a la descalificación de los turistas más sensibles que buscan playas insaturadas y, por otro lado, a la degradación ambiental en las zonas más vulnerables.
Creen que si se reduce la capacidad de los aparcamientos, como los de Cala Mitjana y Cala en Turqueta, si se dan cuenta de que si están llenos, no hay más espacio en la playa.
La entidad medioambiental también propone más medidas para evitar la congestión, como la promoción del transporte público. De igual forma, cree que el acceso a los faros de Cavalleria y Punta Nati debe hacerse de la misma forma que a Macarella y Faváritx, es decir, a ellos solo se puede llegar en bus en temporada alta, y así evitar los desastres. para ver las puestas de sol.
El GOB también se compromete a limitar el número de coches que pueden entrar en Menorca, como ya se está haciendo en Formentera, aunque pide el establecimiento de prioridades para los residentes. Considera que esta medida debe incluirse en la ley de Reservas de Biosfera que está preparando el Consell para su presentación al Parlamento.